Wednesday, November 28, 2018

Y AHORA NOS TOCA A NOSOTROS



Y AHORA NOS TOCA A NOSOTROS

Nos toca a nosotros estar creciendo hacia la muerte
Ya se han estado yendo los que nos trajeron a la vida
Los que nos acompañaron, los que nos enseñaron a caminar
Nos dimos mutuamente de comer en la boca
Nos enseñamos a hablar, a recordar, descubrir, redescubrir
palabras indecifrables

Las mismas canciones que nos cantaron ellos se las volvemos a entonar

Los viejos miedos nuestros ahora abruman sus noches,
¡hay tanta angustia al quedarnos solos!

-¡Yo estoy aquí! ¿A qué vas a tenerle miedo?

Y se apaga la luz,
salimos nuevamente a la calle

Ha comenzando el crepúsculo


Alejandro Gil
28nov2018

Sunday, November 25, 2018

NO TENGO DONDE SENTARME by Alejandro Gil



NO TENGO DONDE SENTARME
by Alejandro Gil
24nov2018

Tuesday, November 20, 2018

MEMORY, POEMA PREMIADO EN II CONCURSO DE CUENTO Y POESÍA EDUARDO PERRONE



LES PRESENTO EL POEMA PREMIADO
EN EL
II CONCURSO DE CUENTO Y POESÍA EDUARDO PERRONE,
organizado por Escuchara en el marco del II Festival Intergaláctico de Escritores -Oficial- (FIDEO), Noviembre de 2018

Sunday, November 18, 2018

EL JUEGO DE LA SILLA


EL JUEGO DE LA SILLA

Nosotros bailábamos. Jugábamos al baile de la silla. Siempre había una silla menos que los pretendientes. Todos buscaban sentarse. Uno iba a quedar parado, iba a perder. Hubo un momento histórico en el que se hizo trampa. Dos, de las tres sillas, estaban ocupadas. Una, por la vicepresidente del país, otra por el ministro de trabajo. (Acaba de renunciar, dicen las noticias.) Eran cuatro los que rondaban las tres sillas. Dos estaban, previa y manipuladamente, ocupadas. El tercer personaje era una mezcla bífida, el cuarto era colectivo. Uno de los dos contendientes iba a ser anulado. El cuarto se llamaba Juan. El bífido, innombrable.

Alejandro Gil
16 de noviembre 2018

Friday, November 16, 2018

EL ALIVIO DE LAS SOMBRAS



EL ALIVIO DE LAS SOMBRAS

Saben las tristes sombras que alivian

Pero como éste, no es un sol
Ni un verso lastimoso,

Ni tampoco un poema y ni siquiera un metapoema que el yo autor aborrece:

Las tristes sombras alivian

Y así dan satisfacción al fin tonto de la poesía vulgar

En este caso, vamos a intentar,
Qué se anule la comanda que ordena una poesía romántica

Dime que me amas

(No lo logré)


Alejandro Gil
16nov2018



Thursday, November 15, 2018

PERDÓN POESÍA


Perdón poesía

perdón, poesía.
debo decir que hasta que no se mate-preso
a los culpables, los cómplices, los delatores
los que juegan al rugby después de haber matado
los que son mozos después de torturar
los que administran la cultura luego de haber masacrado
el perdón seguirá dirigiéndose a vos, poesía

perdón, poesía
debo insultar
hasta que no se mate-preso
al cura ponzoñoso que oró ante fusilamientos
al jefe de obras públicas que construyó cancha de básquet
sobre la fosa común de la escuelita donde estudiamos
los próceres y beneficios de la patria
hasta que no se mate-preso
al que hace juegos de jardín, columpios y hamacas para
los chicos de tucumán siendo que entregó su palabra
para guillotina de la plaza militar
digo perdón poesía
tartamudo estoy ante tanto horror
hasta que no se mate-preso
no podré hilar palabra, como vos lo pedís

hasta que no se mate-preso
al millón de verdugos que pasean por los shoppings de la ciudad,
por las peatonales de la ciudad /
al millón de cerebros asesinos, de miradas sospechosas /
que sospechan de todos y se dedican a frotar las manos sangrientas /
por un pan y ladrillos soldados a sangre sobre cimientos de muertes /
pido perdón poesía
me voy al carajo, siendo ellos los que deberían irse al carajo /
o mandarse a que los maten-presos para pura salud

y ojo con las muertes de estas manos ya bautizadas
siguen al acecho, al hambre de matar por sus cinco sentidos /
cerebro derecho, bang! al corazón
hemisferio izquierdo, puntapié de muerte a la creación
siguen subidos a la maquinaria mortal
directores de cultura –ex jefes de ceremonial-
presidentes de sociedades – del canto popular-
columnistas poeticoides –del periódico marchar-
varitas magníficos –del concierto militar-
estruendosas voces de las radios del confort

hasta que no se mate-preso, perdón
qué dicen mis palabras?
hasta que no se mate-preso
quiero decir, hasta que no se mande-preso
mi todo no quedará calmo hasta que no se mande-preso
a todos los tantos de tanta muerte

perdón poesía
es así
hasta que no se mate-preso-mande-preso
no volveré a nombrarte.

alejandro gil
1996, tucumán, argentina